Vuelvo a tratar un tema un poquito controvertido, pero muy necesario de comentar. Si me preguntan ¿es lo mismo un wedding planner profesional que el supuesto “wedding planner” que ofrecen algunas fincas a las parejas? la respuesta rápida es no, para nada. Excepto alguna que otra excepción.

Si quieres conocer en qué se diferencian estas figuras y por qué existe tanta confusión, te lo cuento en este episodio del podcast. Pero también puedes seguir leyendo este artículo y descubrirlo.

Somos aliados, no enemigos

Lo habitual es que esa persona, que las fincas llaman “wedding planner”, sea en realidad el comercial o el coordinador de eventos de ese espacio. 

¡Y cuidado! En ambos casos su figura es súper importante. De hecho, cuando conseguimos que en una boda trabajen mano a mano el wedding planner contratado por la pareja más el coordinador de ese espacio, las bodas salen increíbles.

Así que en realidad son dos figuras complementarias que se necesitan y que cuando trabajan juntos lo hacen en beneficio de la pareja y la boda sale fenomenal. 

¿En qué se diferencian un wedding planner profesional y el «wedding planner» de una finca?

El problema está en que muchas fincas le acaban poniendo el nombre de wedding planner a una figura que, aunque sus funciones también son importantes, no es un wedding planner. ¿Por qué? Porque no realiza las funciones de un wedding planner y al final los que salen perjudicados somos tanto los wedding planners profesionales como las parejas que creen que cuentan con un wedding planner cuando en realidad no lo tienen

Vamos a ponernos en situación. 

Quizás esta situación ya la has vivido o tal vez no, pero te aseguro que más tarde o más temprano te va a tocar vivirla y más o menos va a funcionar así. 

Imagina que recibes una solicitud de información de una pareja interesada en tus servicios,  quedas con ella para hacer una reunión y todo va genial. La pareja es encantadora, el tipo de boda que quieren es increíble, ya estás viendo cómo va a quedar todo y sientes que realmente la pareja y tú habéis conectado. Tienes esa sensación de que te van a dar el sí, quiero. Ha fluido todo tan bien que parece que esa boda está prácticamente cerrada. 

Así que te despides de la reunión, les envías el presupuesto y al cabo de un par de días la pareja te llama o te manda un mensaje. Llega la noticia que no quieres recibir nunca, pero que desgraciadamente nos va a tocar recibir más de una vez.

No te contrato porque el espacio me pone una wedding planner

En el mensaje te dicen que han conectado muchísimo contigo y que les habría encantado que fueras su wedding planner ¡¡peeero!! resulta que la finca que han contratado para su boda les dice que realmente no te necesitan porque ellos ya les ponen una wedding planner. Que les hacía mucha ilusión contar contigo pero con lo que les ha dicho la finca creen que no te necesitan. 

Ok, calma.

Esto te va a pasar y más de una vez. Pero ¡buenas noticias! Todavía no está todo perdido si realmente es una pareja con la que sientes que has conectado y con la que de verdad quieres trabajar. Aún tienes una manera muy buena de rebatir esta objeción. Porque al final no es más que una objeción de compra, y una de las más habituales.

Si te interesa conocer cuáles son las otras objeciones de compra habituales, para aprender cómo rebatirlas, cerrar más ventas y tener más clientes, dímelo para preparar otro artículo sobre ese tema.

Cómo explicarle a las parejas que no es lo mismo

Tú y yo sabemos las diferencias pero la pareja no sabe que esa supuesta wedding planner que le pone el espacio realmente no lo es. Y te repito, no le estoy quitando valor a ese profesional pero sus funciones son otras. 

Por eso tenemos que luchar e intentar que dejen de utilizar el nombre de nuestra profesión para poner el título a otra que es completamente diferente: un coordinador comercial o responsable de eventos del espacio.

¿Qué puedes hacer? Hablar con esta pareja y decirles amablemente que se aseguren de que lo que les ofrece la finca realmente sea un wedding planner. También puedes darle algunas pautas o una especie de test para que ellos mismos lo puedan comprobar y puedan tomar la decisión de si necesitan tus servicios o no.

Filtros que debe pasar:

  • Un wedding planner profesional siempre va a priorizar los intereses de sus clientes, la pareja.
    Y normalmente el “wedding planner” que les pone el espacio, sea wedding planner, comercial o coordinador, no prioriza los intereses de los novios sino los de sus jefes, el espacio.
    Debes dejarles bien claro que tu prioridad son ellos y vas a velar por sus intereses por encima de todo.
  • Un wedding planner profesional busca, filtra y selecciona los proveedores que de verdad necesitan los novios, en función del estilo de boda, sus gustos, su presupuesto y, muy importante, que tengan la fecha libre.
    El profesional que te regala la finca se limita a darles un listado de proveedores con los que suelen colaborar. Sin asegurarse que realmente estos proveedores les encajen en precio, estén disponibles para su fecha o que hagan un trabajo que encaje con el estilo de boda que los novios quieren. 
  • Un wedding planner profesional acompaña y asesora a los novios en todas las reuniones y visitas técnicas, con todos y cada uno de los proveedores. Porque esa es una de nuestras funciones, al igual que revisar y supervisar todos los contratos que firmen con cada uno de los proveedores de su boda. 
    El supuesto wedding planner del espacio no acompaña a los novios en las reuniones con otros proveedores que no sea el espacio, ni les ayuda a buscar los looks para la boda, ni a concertar cita con el estilista.
  • Un wedding planner profesional controla todo el presupuesto que los novios van a destinar para cada partida en la boda
    La persona de la finca no va comprobando a qué se destina cada parte del presupuesto total y que los novios al final tengan la boda que quieren dentro de su presupuesto.
  • Un wedding planner profesional tiene dentro de sus servicios la coordinación completa de la boda, no sólo de lo que pase dentro de la finca sino de todo lo anterior. Se asegura de que el peluquero y el maquillador lleguen en hora para los preparativos, que el fotógrafo tiene tiempo para hacer las fotos antes de la ceremonia, de que lleguen todos los invitados en los autocares… 
    Este “wedding planner” se encarga sólo de la coordinación de lo que sucede dentro del espacio de la finca. Entonces si la ceremonia es dentro de la finca puede que se encargue de coordinarla, pero del resto no. 
    Que sepan que dentro de tus funciones como wedding planner está coordinar absolutamente todo en la boda, desde primera hora de ese día hasta el final. Incluso desde unos días antes si las características del montaje lo requieren.
  • Un wedding planner profesional acompaña a la pareja desde el instante en que lo contrata hasta que termina la boda.
    Este supuesto wedding planner que ponen las fincas no suele ser un tipo de empleado fijo, por lo tanto hay mucha rotación de personas en este puesto. Cuando van a ver la finca les atiende una primera “wedding planner”, en las siguientes visitas esa persona cambia y el día de la boda igual se encuentran con otra a la que no han visto nunca antes. 
    Sin embargo contigo esto no va a suceder, porque tú vas a ser la persona que va a estar trabajando desde el principio hasta el final en su boda, sin intermediarios ni tener que repetir 40.000 veces todo lo que ya han explicado a la persona anterior.

Una vez que los novios tengan claro esto y se aseguren de las funciones de ese profesional, vuelve a preguntarles si siguen pensando que lo que les está ofreciendo la finca es un wedding planner profesional o un coordinador comercial. 

El problema es que los novios, la mayoría de las veces, no tienen la conciencia de todo lo que implica nuestro trabajo y está en nuestra mano hacerles ver de buenas maneras las diferencias entre una figura y la otra. Solo así pueden ver la necesidad real de contratar tus servicios.

Así que ahora, si te vuelves a ver en una de estas situaciones, ya tienes argumentos suficientes para rebatir esta objeción y conseguir que finalmente esa pareja te contrate como wedding planner. 

Espero que este tema te haya sido súper útil.